الإله
(الإله) اسمٌ من أسماء الله تعالى؛ يعني استحقاقَه جل وعلا...
De Hafsa, esposa del Profeta, que Al-lah esté complacido de ella, dijo: ‘Oh Mensajero de Al-lah, porqué la gente ha salido de su estado de inviolabilidad (Ihram) del ‘Umrah, y tú todavía no has abandonado tu estado de inviolabilidad (Ihram) de tu ‘Umrah. Y él dijo: “Me he rasurado mi cabeza; he marcado mi ofrenda animal (hadi), y no saldré de mi estado de inviolabilidad hasta que llegue el día del An-Naher (día del sacrificio).
El Profeta, que la paz y las bendiciones de Al-lah sean él, entró en el Ihram durante su peregrinación de despedida con el ‘Umrah y el Hayy; al igual que sacrificó su ofrenda animal; y rasuró su cabeza; por lo que su ihram se prolongó, al igual que algunos de sus sahabas. Algunos de ellos entraron en el Ihram con la intención de unir tanto la peregrinación menor (‘Umrah) como la peregrinación mayor (Hayy) en el mismo año. Y la mayoría de ellos no sacrificaron la ofrenda animal; y otros sí que lo hicieron. Cuando llegaron La Meca, hicieron el tawaf (rito de la circunvalación de la Ka’abah) y el sa’i (recorrido que se hace entre las lomas de Safa y al-Marwah). Luego el Profeta, que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, ordenó a quienes no sacrificaron la ofrenda animal, ya sean de los que iban a realizar solamente la ‘Umrah o aquellos que iban a realizar las dos peregrinaciones, a que convirtieran su peregrinación ‘Umrah; y que entren en estado de Ihram. Mientras que él, que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, junto con lo que sí aportaron su ofrenda animal, permanecieron en su estado de inviolabilidad. Fui ahí donde su esposa Hafsa le preguntó el porqué no abandonó su estado de Ihram como los demás, y él le contestó: “Porque he rasurado mi cabeza, y he marcado mi ofrenda animal, lo he sacrificado, y eso me impide abandonar mi estado de inviolabilidad, hasta que la ofrenda llegue al lugar del sacrificio, que es el fin del Hayy, que es el día del An-Naher.