¡Hermanos musulmanes! Teman a Al-lah, Alabado sea, completen su fe siguiendo aquello que trajo el Profeta, que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, tanto sus órdenes como sus informes, pues la felicidad sólo se consigue obedeciendo a Al-lah y a Su Mensajero, y siguiendo su método y su camino. ¡Hermanos en la fe! Dijo el Profeta, que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él: “Un musulmán es el hermano de otro musulmán: él no lo oprime ni lo abandona cuando está oprimido. A quien ayude a su hermano, Al-lah lo ayudará; a quien alivie a su hermano de alguna angustia, Al-lah lo aliviará de alguna de sus angustias el Día de la Resurrección; a quien cubra la falta de un musulmán, Al-lah cubrirá sus faltas el Día de la Resurrección”.