المحيط
كلمة (المحيط) في اللغة اسم فاعل من الفعل أحاطَ ومضارعه يُحيط،...
1. Alif. Lam. Ra[333]. Estas son las aleyas del Libro de la sabiduría.
2. ¿Acaso se sorprenden los hombres de que hayamos concedido la revelación a uno de ellos para que advierta a la gente (del castigo de Al-lah) y dé la buena nueva a los creyentes de que obtendrán una buena recompensa[334] (por sus acciones) junto a su Señor? Pero, quienes rechazan la verdad dicen: “Este (Muhammad) no es sino un simple brujo".
3. Su Señor es Al-lah, Quien creó los cielos y la tierra en seis días[335] y después se asentó sobre el Trono. Él es Quien controla todos los asuntos. Nadie puede interceder ante Él sin Su consentimiento. Este es Al-lah, su Señor; ¡adórenlo, pues! ¿Acaso no reflexionan?
4. Todos retornarán a Él (para ser juzgados el Día de la Resurrección). La promesa de Al-lah es cierta. Él es Quien dio origen a la creación y la reproducirá para recompensar con toda justicia a quienes creen y actúan con rectitud. Y quienes rechazan la verdad tendrán agua hirviendo por bebida y recibirán un castigo doloroso por negarla.
5. Él es Quien hizo del sol una fuente de luz (y calor) y de la luna, una luz (reflejada)[336], y estableció sus fases para que pudieran contar los años y calcular (el paso del tiempo). Al-lah no ha creado todo esto sin un propósito. (Así) explica con detalle las pruebas de Su poder (y Su revelación) a quienes tienen conocimiento (y reflexionan).
6. Ciertamente, en la alternancia de la noche y el día y en la creación de los cielos y de la tierra hay pruebas del poder de Al-lah para los piadosos.
7. Quienes no esperan Nuestro encuentro, se complacen en la vida terrenal y se sienten seguros en ella, así como quienes se desentienden de las pruebas de Nuestra unicidad,
8. morarán en el Infierno como castigo por lo que solían hacer.
9. Ciertamente, a quienes crean y obren rectamente, Al-lah los guiará a través[337] de su fe (hacia el Paraíso), en cuyos jardines de las delicias corren ríos.
10. (Allí) invocarán a Al-lah diciendo: “¡Gloria a ti, Señor!”, y se saludarán (entre ellos) con el saludo de paz (del Islam)[338]; y al final de su invocación dirán: “¡Alabado sea Al-lah, Señor de toda la creación!”.
11. Y si Al-lah se apresurara a responder a los hombres cuando Le suplican algo malo[339] del mismo modo que se apresura a responderles cuando Le suplican algo bueno, ya habrían sido castigados con su destrucción; mas dejamos que quienes no esperan Nuestro encuentro persistan en sus transgresiones, extraviados y desorientados.
12. Si el hombre sufre una desgracia, Nos implora ayuda, ya sea recostado, sentado o de pie; pero si lo libramos de ella, actúa como si nunca Nos hubiese implorado ayuda por desgracia alguna. Así es como los transgresores se dejan seducir por sus propias acciones.
13. Y, ciertamente, destruimos a las generaciones que los precedieron cuando fueron injustas y no creyeron en los mensajeros que llegaron a ellas con pruebas claras (de su veracidad). Así es como castigamos a los pecadores que niegan la verdad.
14. Después, hicimos que los sucedieran en la tierra para ver cómo obraban.
15. Y cuando se les recitan Nuestras claras aleyas, quienes no esperan Nuestro encuentro te dicen (¡oh, Muhammad!): “Tráenos un Corán distinto a este (que no critique nuestros ídolos) o modifícalo”. Diles: “Yo no puedo modificarlo por mi propia cuenta, solo sigo lo que me es revelado. Temo el castigo de un día terrible (el Día de la Resurrección) si desobedezco a mi Señor”.
16. Diles: “Si Al-lah hubiese querido, (yo) no lo habría recitado y (Él) no lo habría dado a conocer. He vivido entre ustedes muchos años[340] (sin que les recitara nada), ¿es que no reflexionan?”.
17. ¿Y quién es más injusto que quien inventa una mentira sobre Al-lah o desmiente Su revelación? En verdad, los idólatras no triunfarán.
18. Y adoran fuera de Al-lah lo que no puede perjudicarlos ni beneficiarlos, y dicen: “Esos (que adoramos) son nuestros intercesores ante Al-lah”. Diles: “¿Acaso informan a Al-lah sobre lo que no sabe de los cielos y de la tierra?”. ¡Alabado y exaltado sea! Él está muy por encima de compartir la divinidad con nadie.
19. Los hombres formaban al principio una sola comunidad (con una sola religión), mas discreparon (y se dividieron en la fe). Y si no hubiese sido por lo que tu Señor había decretado (¡oh, Muhammad!, acerca de posponerles el castigo hasta el Día de la Resurrección), sus discrepancias habrían quedado resueltas (en esta vida terrenal mediante el castigo de Al-lah a quienes negaban la verdad).
20. Y dicen (quienes rechazan la verdad): “¿Por qué no ha descendido con (Muhammad) un milagro de parte de su Señor?”. Diles (¡oh, Muhammad!): “Al-lah posee el conocimiento absoluto del gaib[341] (que Sus siervos desconocen). Esperen, pues, (a que les llegue Su castigo), que yo también espero con ustedes”.
21. Y cuando nos apiadamos de los hombres después de haber sufrido una desgracia, traman contra Nuestra revelación (y Nuestro favor negándolos y burlándose de ellos). Diles (¡oh, Muhammad!): “Al-lah es más rápido planeando”. En verdad, Nuestros enviados (los ángeles) registran todo lo que traman.
22. Él es Quien hace que puedan viajar por tierra y por mar. Y cuando se hallan a bordo de una embarcación y navegan con buen viento, se alegran; pero, si después sopla un viento tempestuoso y las olas los rodean por todas partes y creen que ha llegado su fin, invocan a Al-lah con una fe sincera diciéndole: “Si nos salvas de esta situación, seremos, sin duda alguna, agradecidos”.
23. No obstante, cuando Al-lah los salva, se exceden en la tierra con todo tipo de injusticias (y no cumplen lo que habían prometido a Al-lah). ¡Oh, gentes!, su rebeldía e injusticia se volverán contra ustedes. Disfrutarán temporalmente de esta vida y después retornarán a Nosotros (el Día de la Resurrección) y les informaremos sobre lo que hacían.
24. Ciertamente, la vida mundanal se asemeja a la lluvia que hacemos descender del cielo que hace que broten todo tipo de plantas que se entremezclan, de las que se alimentan los hombres y los animales. Y cuando la tierra se adorna y se embellece (con sus frutos) y quienes la habitan creen que pueden disponer de ella, entonces enviamos sobre la tierra Nuestra orden (de destrucción) por la noche o durante el día, y la dejamos baldía como si el día anterior no hubiese tenido frutos. Así es como aclaramos las pruebas de Nuestro poder a gentes que reflexionan.
25. Y Al-lah invita a la morada de la paz (el Paraíso) y guía a quien quiere hacia el camino recto.
26. Quienes hagan el bien y sean creyentes obtendrán la mejor de las recompensas y gozarán de algo más[342]. Ni las tinieblas ni la humillación cubrirán sus rostros. Esos serán los habitantes del Paraíso y allí vivirán eternamente.
27. Pero quienes realicen malas acciones (nieguen la verdad y desobedezcan a Al-lah, y no se arrepientan) obtendrán una recompensa equivalente al mal que hicieron y la humillación los cubrirá. No tendrán ningún protector fuera de Al-lah. Sus rostros parecerán estar cubiertos por pedazos de la oscuridad de la noche. Esos serán los habitantes del fuego y allí permanecerán eternamente.
28. Y el día en que los reunamos a todos (el Día de la Resurrección), diremos a los idólatras: “Quédense donde están, ustedes y lo que adoraban”. Entonces los separaremos, y los ídolos que adoraron les dirán (desentendiéndose de los idólatras): “No era a nosotros a quienes adoraban.
29. Al-lah basta como testigo entre ustedes y nosotros de que (no les ordenamos adorarnos y nunca aceptamos su adoración) ni siquiera supimos de ella[343]”.
30. Ese día, todos sabrán con exactitud las acciones que realizaron (en la vida terrenal) y retornarán a Al-lah, su verdadero Señor (para comparecer ante Él); y las falsas divinidades que inventaron desaparecerán (y no les servirán de nada).
31. Pregúntales (¡oh, Muhammad!): “¿Quién les da sustento procedente del cielo y de la tierra?, ¿o quién les ha concedido el oído y la vista, y hace surgir lo vivo de lo muerto y lo muerto de lo vivo y tiene el control de todas las cosas?”. Contestarán: “¡Al-lah![344]”. Diles entonces: “¿No Lo temerán, pues (obedeciéndolo y absteniéndose de todo lo que les ha prohibido)?”.
32. Este es Al-lah, su verdadero Señor. ¿Y qué hay más allá de la verdad, sino el extravío? ¿Cómo pueden alejarse (de la fe tras tener pruebas claras de la verdad)?
33. Del mismo modo (que tales idólatras rechazaron la verdad y perseveraron en la idolatría) se ha cumplido el decreto de tu Señor contra quienes se rebelaron y se negaron a obedecerlo de que no creerían.
34. Pregúntales (¡oh, Muhammad!): “¿Hay entre las divinidades que adoran alguna que pueda originar la creación y reproducirla?”. Diles: “Al-lah es (el único) que puede originarla y reproducirla; ¿cómo pueden alejarse (de la verdad y adorar a otros fuera de Él)?”.
35. Pregúntales (¡oh, Muhammad!): “¿Hay entre las divinidades que adoran alguna que pueda guiar hacia la verdad?”. Diles: “Al-lah es (el único) que guía hacia la verdad”. ¿Quién tiene más derecho a ser seguido: Quien guía hacia la verdad (Al-lah) o quien no puede encontrar el buen camino a menos que sea guiado? ¿Qué les sucede? ¿Cómo juzgan?”.
36. Y la mayoría de los hombres siguen solo conjeturas, y las conjeturas no son un argumento válido frente a la verdad. Ciertamente, Al-lah conoce bien lo que hacen.
37. Y este Corán no puede ser obra de otro que no sea Al-lah y ha sido revelado como confirmación[345] de las Escrituras anteriores y como una explicación detallada de Sus preceptos. No hay ninguna duda sobre él y proviene del Señor de toda la creación.
38. ¿O acaso dicen que (Muhammad) se lo ha inventado? Diles (¡oh, Muhammad!): “Produzcan una sura similar[346] y convoquen a todos los que puedan fuera de Al-lah (para que les ayuden a producirla) si son veraces”.
39. Sin embargo, desmienten (el Corán) sin siquiera tener conocimiento de él (y sin haber reflexionado sobre sus aleyas) y niegan lo que no pueden comprender (acerca del Día de la Resurrección). De igual modo negaron la verdad quienes los precedieron. Observa (¡oh, Muhammad!) cuál fue el final de los injustos.
40. Y entre ellos (los habitantes de La Meca) hay quienes creen en él (en el Corán) y quienes nunca lo harán. Y tu Señor (¡oh, Muhammad!) conoce bien quiénes no creen en él por su obstinación, injusticia y corrupción.
41. Y si te desmienten (¡oh, Muhammad!), diles: “Yo soy responsable de mis acciones y ustedes de las suyas. Ustedes no son responsables de lo que yo hago ni yo soy responsable de lo que ustedes hacen”.
42. Y entre ellos hay quienes te escuchan (si recitas el Corán, mas no se benefician de lo que oyen). ¿Acaso puedes hacer que los sordos (de corazón) escuchen cuando (además) no razonan (¡oh, Muhammad!)?
43. Y entre ellos hay quien te observa (pero no ve las pruebas de que eres un Profeta). ¿Acaso puedes guiar a los ciegos (de corazón) cuando no ven (la verdad)?
44. Al-lah no es injusto con los hombres en lo más mínimo, sino que son los hombres quienes son injustos consigo mismos (al rechazar la verdad y desobedecer los mandatos de Al-lah).
45. Y el día en que (Al-lah) los reúna (el Día de la Resurrección) será como si los hombres solo hubiesen vivido un instante[347] y se reconocerán entre ellos. (Ese día) quienes negaban el encuentro con Al-lah y no estaban guiados serán los perdedores.
46. Y aunque te mostremos en esta vida parte del (castigo) que les hemos prometido o te hagamos perecer (antes de presenciarlo, ¡oh, Muhammad!), igualmente regresarán a Nosotros (y serán juzgados con justicia); y Al-lah es testigo de lo que solían hacer.
47. Y cada comunidad ha tenido un Mensajero[348]; y, tras su llegada, Al-lah las juzgó con equidad (castigó a quienes los desmentían y salvó a Sus mensajeros y a quienes creyeron en ellos) y no fueron tratadas de manera injusta.
48. Y dicen (los idólatras de tu pueblo, ¡oh, Muhammad!): “¿Cuándo se cumplirá esta promesa (del castigo o del Día de la Resurrección con la que nos amenazan tú, Muhammad, y quienes te siguen), si son veraces?”.
49. Diles: “Yo no tengo poder para reportarme a mí mismo un bien ni para alejar de mí un mal, solo me sucederá lo que Al-lah quiera que me ocurra, (ni tengo conocimiento sobre cuándo tendrá lugar lo que me preguntan). Todas las comunidades tienen un tiempo decretado (para su destrucción). Cuando este llegue, no podrán retrasarlo ni adelantarlo siquiera un instante”.
50. Diles: “Díganme; si Su castigo se abatiera sobre ustedes (súbitamente) de noche o de día, ¿qué conseguirían apresurándolo, oh, idólatras?
51. ¿Creerían una vez que les llegara (cuando de nada les serviría entonces la fe)?”. (En ese momento se les diría:) “¿¡Ahora creen, cuando antes pedían (burlándose) que se les adelantara el castigo!?”.
52. Después se les dirá a quienes fueron injustos: “Sufran el castigo eterno. ¿Acaso no obtienen la retribución que sus acciones merecían?”.
53. Y te piden que les informes sobre si (la resurrección) sucederá de verdad. Diles: “Sí, por mi Señor que es cierta, y no podrán escapar (de Su castigo)”.
54. Y si todos los injustos que niegan la verdad poseyeran cuanto hay en la tierra, lo ofrecerían a cambio de librarse del castigo (el Día de la Resurrección). Y se arrepentirán en su interior (por no haber creído) cuando lo vean, y serán juzgados con equidad y no serán tratados injustamente (en lo más mínimo).
55. A Al-lah pertenece cuanto hay en los cielos y en la tierra. Ciertamente, Su promesa es cierta, pero la mayoría de los hombres no lo saben.
56. Él es Quien da la vida y la muerte, y todos retornarán a Él (el Día de la Resurrección).
57. ¡Gentes!, les ha llegado una exhortación de su Señor, una cura para los corazones, una guía y misericordia para los creyentes (el Corán).
58. Diles (a todos los seres humanos, ¡oh, Muhammad!) que se alegren del favor y de la misericordia de Al-lah (por guiarlos hacia el Islam), pues eso es mejor que todo lo que puedan acumular (en esta vida).
59. Diles: “Díganme, ¿por qué han declarado ilícita una parte de las provisiones que Al-lah les ha concedido y otras lícitas? ¿Les ha dado Al-lah permiso para ello o están inventando mentiras contra Al-lah?”.
60. ¿Qué creen quienes atribuyen mentiras a Al-lah (que se hará con ellos) el Día de la Resurrección? Al-lah concede Su favor a los hombres, mas la mayoría de ellos son desagradecidos.
61. Y tanto si estás ocupado en algún asunto como si recitas parte del Corán (¡oh, Muhammad!), o hagan lo que hagan (ustedes, creyentes), sepan que Al-lah es testigo de ello mientras lo llevan a cabo. Tu Señor no deja pasar nada por alto ni en la tierra ni en el cielo (¡oh, Muhammad!), aunque tenga el tamaño de una ínfima partícula; y no hay nada de menor o mayor tamaño que no esté registrado en un Libro esclarecedor junto a Él (la Tabla Protegida).
62. En verdad, quienes son amados por Al-lah y están más cerca de Él de entre Sus siervos no tendrán nada qué temer (en la otra vida) ni se sentirán afligidos;
63. (esos son) quienes creen (en la unicidad de Al-lah) y tienen temor de Él (obedeciéndolo en todo lo que ordena y alejándose de lo que prohíbe).
64. Esos obtendrán buenas noticias en esta vida y en la otra. Las promesas de Al-lah son inalterables. Este es el gran triunfo.
65. Y no te aflijas por lo que dicen (los idólatras). A Al-lah pertenece todo el poder; y Él es el Oyente (de todas las cosas), el Omnisciente.
66. Ciertamente, a Al-lah pertenece cuanto hay en los cielos y en la tierra. ¿Qué siguen, entonces, quienes adoran a otros fuera de Al-lah[349]? No siguen más que conjeturas y no hacen más que mentir.
67. Él es Quien creó la noche para que descansen y el día para que vean (y puedan procurarse su sustento). En esto hay pruebas (de que solo Al-lah merece la adoración) para quienes oyen (y reflexionan).
68. Y dicen[350]: “Al-lah ha tomado para Sí un hijo”. ¡Glorificado sea! Él no necesita nada de nadie. A Él pertenece cuanto hay en los cielos y en la tierra. ¿Tienen una prueba de ello o dicen sobre Al-lah lo que no saben?
69. Diles (¡oh, Muhammad!): “Quienes inventan mentiras contra Al-lah no triunfarán”.
70. Disfrutarán temporalmente de los bienes de esta vida y después retornarán a Nosotros, y los haremos sufrir un severo castigo por rechazar la verdad.
71. Y cuéntales (¡oh, Muhammad!) la historia de Noé cuando dijo a los suyos: “¡Pueblo mío!, si les cuesta (aceptar) mi presencia entre ustedes y que les recuerde las pruebas (de la unicidad) de Al-lah, (sepan) que en Él deposito mi confianza. Confabúlense, ustedes y aquello que adoran, en mi contra; expongan su decisión sin vacilar y ejecútenla sobre mí sin más demora.
72. Y si se alejan (del mensaje que les traigo), (recuerden que) no les pido ninguna remuneración (por transmitírselo); es Al-lah Quien me recompensará por ello. Y se me ha ordenado ser de quienes se someten a Él.
73. Pero lo desmintieron, y lo salvamos (junto) con quienes se hallaban con él en el arca, e hicimos que ellos sucedieran en la tierra (a quienes habían rechazado la verdad); y ahogamos a los que habían negado Nuestras pruebas. Observa (¡oh, Muhammad!) cuál fue el final de quienes fueron advertidos (y no creyeron).
74. Después enviamos otros mensajeros con pruebas evidentes a sus respectivos pueblos, mas no creyeron tras la llegada de estos, como tampoco creyeron con anterioridad. Así es como sellamos los corazones de los transgresores.
75. Posteriormente enviamos a Moisés y a Aarón con Nuestras pruebas y milagros para que se presentasen ante el Faraón y sus dignatarios, pero estos se llenaron de orgullo y fueron perversos.
76. Y cuando les llegó la verdad procedente de Nosotros, dijeron: “Esto es, en verdad, pura brujería”.
77. Moisés dijo: “¿Dicen de la verdad, una vez que les ha llegado, que es brujería? Ciertamente, los brujos no prosperarán (ni triunfarán en esta vida ni en la otra)”.
78. (Los dignatarios) dijeron: “¿Han venido para apartarnos de lo que nuestros antepasados seguían y para que ustedes dos dominen la tierra? ¡No vamos a creer en ustedes!”.
79. Y dijo el Faraón: “¡Tráiganme a todos los brujos instruidos!”.
80. Y cuando los brujos llegaron, Moisés les dijo: “Arrojen lo que quieran arrojar”.
81. Y cuando estos arrojaron (sus cuerdas y cayados, y hechizaron los ojos de quienes miraban), Moisés dijo: “Lo que han realizado es (solo) brujería, y Al-lah la anulará. Ciertamente, Al-lah no deja que prospere la obra de los corruptores.
82. Y Al-lah hace que triunfe la verdad (sobre la falsedad) con lo que dictamina, aunque ello disguste a los perversos”.
83. Pero solo creyeron en Moisés unos pocos de entre su pueblo[351] por miedo a que el Faraón y sus dignatarios[352] tomaran represalias contra ellos. El Faraón fue, en verdad, altivo (y tirano) en la tierra y era de los transgresores.
84. Moisés dijo: “¡Pueblo mío!, si de verdad creen en Al-lah y someten a Él (su voluntad), depositen su confianza en Él”.
85. Estos dijeron: “A Al-lah nos encomendamos”. (Y dijeron:) “¡Señor nuestro!, no permitas que caigamos bajo el poder de los injustos (y piensen que la verdad está con ellos para ponernos a prueba en nuestra religión).
86. ¡Y sálvanos, por Tu misericordia, de quienes rechazan la verdad!”.
87. E inspiramos a Moisés y a su hermano que se establecieran con su pueblo en Egipto, que hicieran de sus hogares un lugar de adoración[353], que cumplieran con la oración y que anunciaran a los creyentes la buena noticia (de la victoria en esta vida y en la otra).
88. Y Moisés invocó a su Señor (junto con su hermano) diciendo: “¡Señor nuestro!, tú concediste al Faraón y a los suyos esplendor y riquezas en esta vida, ¡oh, Señor!, para que desviaran a los hombres de Tu camino. ¡Señor!, destruye sus riquezas y endurece sus corazones para que no crean hasta que vean el castigo doloroso (que les espera)”.
89. (Al-lah) respondió: “Su plegaria ha sido aceptada. Manténganse firmes (en la religión y en la exhortación de Mi mensaje al Faraón y a su pueblo) y no sigan el camino de quienes desconocen (la verdad de Mi promesa y Mi castigo)”.
90. E hicimos que los hijos de Israel cruzaran el mar; mas los persiguieron el Faraón y su ejército con tiranía y hostilidad. Y cuando (las aguas se abatieron sobre el Faraón y) él se estaba ahogando (y vio el castigo de Al-lah), dijo: “Creo que no hay más divinidad que Aquel (Dios) en el que creen los hijos de Israel y soy de quienes se someten a Él”.
91. (Dijo Al-lah:) ¿¡Ahora (crees, cuando de nada sirve ya la fe) y (Nos) desobedeciste con anterioridad y fuiste de los corruptores!?
92. Hoy rescataremos tu cuerpo (del agua) para que sirva de lección de Nuestra parte a quienes te sucedan[354]. Y, ciertamente, muchos hombres se desentienden de Nuestras pruebas (y de Nuestra revelación).
93. E hicimos que los hijos de Israel se establecieran en un lugar honorable (en las tierras de la Gran Siria) y les concedimos de las provisiones buenas y lícitas (de la tierra). Y no discreparon entre ellos (dividiéndose en la religión) hasta llegarles el conocimiento (de la verdad[355]). Ciertamente, tu Señor (¡oh, Muhammad!) los juzgará el Día de la Resurrección acerca de sus discrepancias.
94. Y si dudas[356], ¡oh, Muhammad!, sobre lo que te hemos revelado, pregunta a quienes leían las Escrituras con anterioridad a ti[357]. Ciertamente, te ha llegado la verdad procedente de tu Señor (acerca de que tú eres un Profeta). No seas, pues, de los que dudan (sobre ella).
95. Y no seas de quienes niegan las pruebas de Al-lah porque estarías entre los perdedores.
96. En verdad, aquellos sobre quienes se justifique la amenaza del castigo de tu Señor no creerán,
97. aunque reciban todo tipo de pruebas, hasta que vean el castigo doloroso (que les espera, cuando de nada les sirva ya creer).
98. No hubo ningún pueblo que creyera y se beneficiara de su fe (cuando el castigo por haber desmentido a su Mensajero era ya inminente), salvo el de Jonás[358]. Cuando creyeron, los libramos de un castigo humillante en esta vida y les permitimos disfrutar durante un tiempo.
99. Y si tu Señor quisiera (¡oh, Muhammad!), haría que creyeran todos los habitantes de la tierra[359]. Pero tú no puedes obligar a la gente a aceptar la fe.
100. Y nadie puede creer si no es con la voluntad de Al-lah. Y el castigo se abatirá sobre quienes no reflexionan (en Sus pruebas y mandatos).
101. Di (a tu pueblo, ¡oh, Muhammad!): “Observen y reflexionen sobre (todas las pruebas acerca de la unicidad de Al-lah presentes en) los cielos y en la tierra. Pero ni las pruebas de Al-lah ni los amonestadores servirán de nada a quienes se niegan a creer.
102. ¿Acaso esperan días (de destrucción) similares a los que sufrieron sus predecesores (cuando fueron castigados por negar la verdad)? Diles: “¡Aguarden, entonces, (a que les llegue el castigo de Al-lah) que yo también espero con ustedes (que les llegue)!”.
103. Entonces salvamos a Nuestros mensajeros y a los creyentes, pues Nos hemos comprometido a hacerlo.
104. Diles (¡oh, Muhammad!): “¡Oh, gentes!, si dudan acerca de mi religión, sepan que no adoro lo que ustedes adoran fuera de Al-lah, sino que adoro al Dios Único, que es Quien hace que perezcan. Y se me ha ordenado ser de los creyentes
105. y someterme completamente y con sinceridad a Al-lah, y no ser de los idólatras.
106. Y (se me ha ordenado) no invocar fuera de Al-lah aquello que no puede ni beneficiarme ni perjudicarme, pues, de hacerlo, sería de los injustos”.
107. Si Al-lah hace que te alcance una desgracia, solo Él podrá librarte de ella; y si quiere el bien para ti, nadie podrá impedir (que seas agraciado con) Su favor. Él lo concede a quien quiere de entre Sus siervos, y Él es el Indulgente, el Misericordioso.
108. Di (a tu pueblo, ¡oh, Muhammad!): “¡Gente!, les ha llegado la verdad procedente de su Señor. Quien siga el buen camino se guiará para su bien, pero quien se desvíe de él se extraviará en perjuicio propio; y yo no soy responsable de lo que hacen (y no puedo obligarlos a seguirlo)”.
109. Y sigue lo que te ha sido revelado y sé paciente hasta que llegue el juicio de Al-lah. Y Él es el mejor de los jueces.