الآخر
(الآخِر) كلمة تدل على الترتيب، وهو اسمٌ من أسماء الله الحسنى،...
De Salamata Ibn Al-Kú, Al-lah esté complacido con él, que dijo: “Un espía de los idólatras vino a fisgonear los asuntos del Mensajero de Al-lah, Él le bendiga y le dé paz, mientras se encontraba de viaje. El espía acudió a los compañeros del Mensajero de Al-lah, Él le bendiga y le dé paz, para sacarles información, y luego se marchó. El Mensajero de Al-lah, Él le bendiga y le dé paz, cuando supo lo que había ocurrido, dijo: ‘Buscadlo y matadlo. Quien le dé muerte, se habrá ganado sus pertenencias como botín (nafal)”. En otro relato: “Preguntó: ¿quién ha matado al espía?” Dijeron: “Ibn Al-Kú”. Él dijo: “suyas serán todas sus pertenencias”.
En este hadiz hallamos el veredicto del Islam con respecto a aquellos idólatras y asociadores que espían los asuntos musulmanes mientras están en guerra con ellos. De Salamata Ibn Al-Kú, Al-lah esté complacido con él, que dijo: “Un espía de los idólatras vino a fisgonear los asuntos del Mensajero de Al-lah, Él le bendiga y le dé paz, mientras se encontraba de viaje. El espía acudió a los compañeros del Mensajero de Al-lah, Él le bendiga y le dé paz, para sacarles información, y luego se marchó. El Mensajero de Al-lah, Él le bendiga y le dé paz, cuando supo lo que había ocurrido, dijo: ‘Buscadlo y matadlo. Quien le dé muerte se habrá ganado sus pertenencias como botín (nafal)”. El nafal es la parte con la que se distingue a cada hombre además de su lote del botín general. Por “pertenencias” se entiendo todo los que poseía esa persona, desde la ropa que vestía a sus armas. En este apartado entran los animales de monta, la montura y sus herramientas, todo lo que posea de ganado o dinero y todo el oro o plante que lleve puestos.