المتعالي
كلمة المتعالي في اللغة اسم فاعل من الفعل (تعالى)، واسم الله...
Narró Aisha -Al-lah esté complacido con ella-: “Se me acercó una mujer con sus dos hijas, pidiendo ayuda. En ese momento solamente tenía un dátil, así que se lo di. La mujer lo dividió entre sus dos hijas y no lo probó. Después se levantó y se marchó. A continuación, entró el Mensajero de Al-lah -la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él- y le conté lo que había sucedido. Él me dijo: “Quien fue probado por Al-lah con hijas, y las cuida y mantiene como es debido, Al-lah hará que ellas sean una protección para él contra el fuego del Infierno””.
A Aisha -Al-lah esté complacido con ella- la vino a ver una mujer con sus dos hijas pidiendo ayuda, por ser pobre. Dijo Aisha: “En ese momento solamente tenía un dátil y se lo di a la mujer”. La mujer lo dividió en dos mitades entre sus dos hijas, dándole una mitad a cada una, y la madre no lo probó. Luego entró el Mensajero de Al-lah -la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él- (después de haberse ido la mujer y sus hijas) en el lugar donde se encontraba Aisha y ésta le contó lo sucedido. Él le dijo: “Quien fue probado por Al-lah con hijas y las cuida y mantiene como es debido, Al-lah hará que ellas sean una protección para él contra el fuego del Infierno”, esto es, a quién Al-lah le ha destinado hijas, y no se refiere a que las hijas son algo malo, es como cuando Al-lah dice: “Los pondré aprueba con cosas malas y cosas buenas, pero finalmente volverán a mí para ser juzgados” [Corán, 21: 35]. El sentido de este hadiz es que quien tenga dos hijas y las mantenga como es debido, serán el velo que lo protegerá del fuego el Día del Juicio. Es decir, Al-lah lo protegerá del fuego debido al buen trato que ha brindado a sus hijas. Esto se debe a que la niña es débil y le es difícil buscar los medios para vivir, y es el hombre quien puede y debe hacerlo. Al-lah dice en Su Libro: “Los hombres son responsables del cuidado de las mujeres debido a las diferencias (físicas) que Al-lah ha puesto entre ellos y por su obligación de mantenerlas con sus bienes materiales” [Corán, 4: 34].